Medio día era y la vida transcurre bajo la lluvia que desde temprano cae sin
parar.
De la vida y muerte hablaba cuando la verdad bajo la mesa se encontraba,
saltando desde abajo el silencio llego a romper.
Reclamos que no hice, silencios que guarde y no entiendo que dices que hice
cuando fuiste tú quien provoco la ira.
Desubicada vives y en las tinieblas estas creyendo que todo está bien, mas
ya no sigo, porque por gusto.
El malo de la historia siempre soy y apenas dándome cuenta estoy. Saliendo
de noche, descansando en el día mi naturaleza oscura revelo. Nada de lo que
haga, nada de lo que diga, la misma historia siempre está viva.
La inspiración se cortó, pero el enojo se quedó... esto se termina acá y la
vida ya no vuelve a ser igual.
